Hostelería

La reforma de un clásico de la calle San Nicolás se planteó como un regreso a las texturas, los materiales básicos, diseños clásicos, elementos de líneas puras. Técnicamente, el reto consistía en ampliar superficie de público en una zona saturada; estudiando la normativa municipal y aplicándola con criterio, se consiguió el objetivo.

Suelos de caucho puro, paredes de arcilla, hormigón, hierro, madera de roble recuperado. La reinterpretación de un local centenario.

Intimidad en un comedor que no abusa de plazas sino que opta por crear espacios cómodos y proporcionados. La elección del sillón Toledo en su versión Air, redunda en la idea de recuperar clásicos imperecederos.

Detalle de espacios singulares.

Elementos como el neón, se integran a la perfección en este espacio.

Logotipo impreso en el hormigón del frente de barra.

El reto es instalar una Actividad Clasificada en el Casco Antiguo, donde en poco espacio hay que distribuir la cocina, los aseos, la zona de público...y todo ello que cumpla todas las normativas que le son de aplicación

Además de que consigamos un ambiente cálido y acogedor

Se le ha dado mucha importancia al uso de la madera y al cuidado de la iluminación

Se ha buscado la calidez con los acabados en madera, con puertas correderas para optimizar el espacio

Se ha cuidado la iluminación en la zona de público y los colores neutros para crear un ambiente confortable

Se han usado materiales naturales, como el acero corten, la madera natural, el mármol, para el frente de barra y zona de público

La sencillez de composición y de empleo de materiales, tratan de proyectar a través del único hueco existente en la fachada, la alegoría del panel interior. El toque de color rojo alude al mensaje festivo del BAILE DE LA ERA.

Un gran mural alegórico de la dantza por excelencia de Estella-Lizarra, que da nombre al establecimiento, recorre longitudinalmente la pared izquierda desde la fachada, penetrando hasta el interior de la zona de aseos.

El local, en forma de prisma, se proyecta hacia el interior en función de la demanda de ocupación. En primer lugar la zona de mesas, en el centro una pequeña barra situada a la derecha y al fondo los servicios y el oficio tras dos grandes puertas correderas.

Detalle de iluminación de barra.

Mueble de barra. Al fondo puertas-pizarra correderas de acceso a los aseos y oficio.

Detalle de los materiales empleados.

En una de las calles más concurridas del casco antiguo de Iruña, entre una iglesia medieval y en los bajos de un edificio modernista catalogado, ahí está nuestra pizzería, al más puro estilo italiano.

En la zona de venta destaca un gran mostrador-vitrina de mármol de Carrara, combinado con granito y vidrio, calefactado para la exposición de los diversos tipos de pizzas.

Sin perder de vista la elección de unos materiales cálidos, madera y gres con efecto metálico, incluso respetando y dejando vistas alguna de las vigas de madera originales del edificio.

Las vigas y el techo inclinado.

Tras el mostrador se accede al obrador.

La fachada.

Coincidiendo con el relevo generacional, la nueva dirección del asador nos encargó la renovación de la imagen del local, la actualización de su diseño y la ordenación de los espacios, pero manteniendo la esencia del asador que inauguraron sus padres.

En el local, de grandes dimensiones, destinamos parte de un primer comedor como zona de recepción previa al restaurante, exposición y venta de la amplia vinoteca de San Martín de Unx

Se han mantenido elementos existentes, arcos de piedra y cerchas de madera, integrándolos en el nuevo diseño y dotándolos de un nuevo valor

Se han actualizado las instalaciones de servicio, renovado revestimientos y mobiliario, y se ha hecho un diseño específico de la iluminación, así como el acondicionamiento acústico del local

Los amplios comedores pueden redistribuirse a voluntad mediante un tabique móvil de vidrio con impresión digital haciendo el espacio más acogedor.

Una iluminación de gran calidad y el diseño del acondicionamiento acústico de los distintos comedores crean un ambiente agradable que contribuye a la grata experiencia de los clientes

Local de hostelería que se decidió ambientar en el mundo de la aviación debido a su cercanía con el aeropuerto de Noáin. Se creó un ambiente de tasca tradicional salpicado de elementos alegóricos a los viejos hangares de principios del siglo XX.

Detalle de la trasera de barra en la que el mobiliario fue diseñado expresamente combinando hierro en crudo y madera.

El local se abrió al exterior el máximo posible a través de los huecos de fachada, creando incluso en ella, una zona de servicio a público y terraza.

La ausencia de salida de humos nos llevó a crear un oficio perfectamente dotado para grandes elaboraciones.

Detalle del apoyapiés en barra

En los aseos continuaron los detalles relacionados con la temática del local.

Una zona de mesas alojada en una vitrina proyectada en fachada con dos entradas laterales, nos adentra en un universo de lineas curvas, formas cilíndricas y prismáticas que conforman los diferentes espacios del bar restaurante. Los aros de luz suspendidos del techo se entrelazan y combinan tratando de trasmitir un cálido abrazo ambiental.

La alineación de mesas a la izquierda, la barra curvada a la derecha y el despiece del pavimento, nos invitan a acceder a los cilindos interiores que conforman la zona más tranquila del bar y el comedor del fondo, conectados a través de un túnel prismático que focaliza la luz natural del patio posterior.

El comedor esta conformado por un cilindro en el que aparecen, a modo de macla los prismas que albergan la cocina y el paso que conecta con los servicios y el bar. La alegoría del circulo se repite en la iluminación.

Fachada: «vitrina» con las dos salidas laterales.

Cancela lateral de salida y zona interior de mesas en la «vitrina».

Comedor bañado por la luz natural desde el patio.

En una urbanización de nueva construcción se crea un bar cafetería huyendo de soluciones temáticas y estéticas de fácil recurso.

El interior, amplio y cómodo, ofrece una imagen atractiva en las distintas zonas: pastelería, barra, comedor…

Un buen acondicionamiento acústico, y una buena climatización junto con una cuidada iluminación específica para cada zona, resuelven los aspectos técnicos.

El amplio y luminoso comedor puede abrirse y cerrarse a voluntad.

mediante un gran cierre corredero…

que permite al bar funcionar de modo independiente.

La nueva generación que explota el local necesitaba renovar su imagen. Manteniendo la estructura, se redecoró el espacio con nuevos materiales, colores e iluminación.

En la entreplanta se estableció un juego entre el mobiliario estándar y el fabricado a medida. Elementos como el botellero luminoso o las barandillas de vidrio, aportaron limpieza al conjunto.

Desde la entreplanta, se puede ver la zona de público sentado en la planta baja.

Detalle del ante-aseo y la elección de un diseño contrastando con el resto del local.

Detalle de acabados.

Banco de diseño original, fabricado a medida.